Tiene un diseño similar al Echo Dot de cuarta generación, pero suele venir con un acabado más colorido y lúdico para atraer a los niños.
Tiene un altavoz integrado que ofrece un sonido de calidad, adecuado para escuchar música, cuentos y respuestas de Alexa.
Se conecta a través de Wi-Fi para acceder a la nube de Amazon y a los servicios de Alexa.
Equipado con varios micrófonos para captar los comandos de voz desde diferentes direcciones, lo que permite una detección precisa incluso en entornos ruidosos.
Incorpora el asistente virtual Alexa de Amazon, que puede responder preguntas, reproducir música, contar chistes, contar cuentos y más.
Viene con controles parentales para que los padres puedan monitorear y limitar el acceso de los niños a ciertos contenidos y funciones.