Especialmente formulada para abordar quemaduras superficiales, piel dañada e irritada, grietas y acaloramiento cutáneo.
Puede aplicarse tanto en el rostro como en el cuerpo, adaptándose a las necesidades de adultos y niños por igual.
Su textura forma una película sobre la piel, facilitando una restauración rápida de la integridad y el bienestar cutáneo.
Gracias a la combinación de ingredientes como la alantoína, el sorbitol y la vitamina E, la crema contribuye a la recuperación y regeneración de la epidermis.
Proporciona una hidratación profunda, vital para el proceso de curación y bienestar de la piel.
Calma las zonas dañadas, reduciendo la irritación y ofreciendo un alivio significativo.
La crema forma una barrera protectora, proporcionando una protección óptima para la piel durante el proceso de recuperación.
Contribuye a mantener bajo control la flora bacteriana y fúngica en la piel, promoviendo un ambiente propicio para la recuperación.
Es especialmente recomendada para pieles debilitadas por diversas agresiones exteriores, proporcionando cuidados específicos y fortaleciendo la barrera cutánea.
Indispensable en el botiquín para aliviar todo tipo de lesiones cutáneas que puedan surgir en el día a día.